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El subtítulo de este artículo dice bastante más de lo que pudiera parecer y es un buen resumen de todo lo que explicaremos a continuación. La Walther PPQ M2 en .22 lr es el ante todo el complemento perfecto para aquello poseedores de la versión en 9 mm., pero también es una estupenda pistola para el tiro recreacional y aquellos que quieran subir o mantener la categoría en la modalidad estándar de nuestro país.
La clonación
Acostumbrados a que la mayoría de los modelos en 22lr, de las pistolas de servicio o deportivas sean versiones “reducidas” de las mismas, WALTHER presenta un auténtico clon en el más popular de los pequeños calibres. Sin duda una muy buena noticia para aquellos que poseen esta pistola en 9 mm. El hecho de poder entrenar o competir en modalidades de este económico calibre, añade un innegable valor a toda la familia PPQ M2
FOTO 1 - Como se puede observar la versión 9mm y 22 lr en 5" son idénticas exteriormente
La serie Walther PPQ M2 en 9 mm causó sensación cuando apareció en 2013 por varias de sus características, aunque sin duda la más alabada fue su disparador denominado “Quick Defense Trigger”. Pues bien, esta versión en .22 lr lo reproduce fielmente, algo realmente increíble, teniendo en cuenta que estamos hablando de dos pistolas que usan sistemas de disparo totalmente diferentes. En el caso de la 9 mm, el habitual sistema de aguja lanzada de muchas pistolas de polímero y para la versión en .22 lr, un más tradicional sistema de simple acción con martillo oculto. El mismo recorrido del gatillo, la misma falta de arrastres y su limpia rotura de “varilla de cristal”. Analizándolo al detalle, con las dos armas encima de la mesa, el reset parece ligeramente más suave y un poco más largo. Por si lo anterior fuese poco, el peso del mismo está también prácticamente parejo, sólo una mínima diferencia de apenas 220 gramos, 2,150 kg de la 9 mm frente a 1,93 kg de esta versión en 22 lr. Estas insignificantes diferencias pasan desapercibidas a la hora de ponernos a disparar.
FOTO 2 - El disparador de esta versión en 22ll nada tiene que envidiar a la versión en 9mm
No termina esta igualdad con el disparador, las dimensiones son idénticas e incluso el peso solo difiere en apenas en 100 gr en vacío, tanto en esta versión de 5” (127 mm) de cañón como en la de 4” (102 mm). Por tanto la ergonomía de las pistolas es la misma, solo se echa en falta los lomos intercambiables de la empuñadura. Su tamaño fijo viene a corresponderse con el lomo mediano, es la única “carencia” que tiene para considerarla un arma de entrenamiento perfecta. Por lo demás, el riel picatinny, los controles ambidiestros, la textura de la empuñadura, los cortes de la corredera son idénticos.
Estando su precio en línea con el costo de los kits de conversión del 22 lr, esta pistola aporta lo mejor de estos kits sin sus inconvenientes, la ventaja es que poseemos un arma completa. Muchas veces los kits presentan problemas de ajuste y por consiguiente problemas de fiabilidad. En las pruebas realizadas con esta arma y después de haber realizado unos 200 disparos con munición estándar y de alta velocidad de la marca CCI, no tuvimos incidencia alguna. Ahora bien, hay que tener en cuenta que como arma completa ocupará un preciado hueco en nuestra licencia.
Las diferencias
Ya hemos comentado en la sección anterior que su sistema de disparo es simple acción con martillo oculto debajo de la corredera. El motivo de este cambio seguramente se deba a que el retroceso pueda estar al límite de su fuerza para montar la aguja, tras cada disparo con un muelle que tenga la suficiente fuerza para “picar” con fiabilidad el borde de un cartucho del 22 lr. En cualquier caso esto es una suposición personal, aunque el resultado es perfecto, ya que los disparadores de la versión en fuego central y anular son casi idénticos, como hemos señalado antes.
FOTO 3 - Pistola de simple acción con martillo oculto. Detalle de las posiciones del martillo
Otra diferencia estructural es su sistema de acerrojamiento, que es de inercia de masas como corresponde a un calibre .22 lr, frente al acerrojamiento tipo browning de la versión 9mm. El cañón es fijo y como el resto de mecanismos está sustentado en un subchasis de acero dentro del armazón de polímero. Por cierto, este tiene una tuerca en la punta en la que es posible colocar un adaptador roscado para colocar un silenciador u otro dispositivo.
FOTO 4 - Desmontaje básico de la pistola
La corredera no es de acero, sino que está mecanizada sobre un bloque de aluminio, con refuerzos de acero en las zonas críticas, que por rozamiento o impacto, se prestan a desgaste.
FOTO 5 - Detalle de los refuerzos de la corredera en acero pulido
Además el sistema de miras en la versión de cañón de 5” está mejorado con respecto a su hermana mayor táctica, a diferencia de esta que incorpora un sistema de puntería de combate. Guardando la misma estética y sus características de ergonomía, el alza metálica es ajustable en altura y deriva, siendo el punto de mira de fibra óptica roja.
Una muestra del cuidado detalle y preocupación por mantener las características de toda la serie PPQ M2 en la versión 22 lr es su cargador. Como es lo normal es monohilera y por tanto mucho más estrecho que el modelo bifilar en 9 mm. Por lo que para poder mantener la ergonomía de la empuñadura, el interior de la misma se ha sobredimensionado, como se puede apreciar en las fotografías.
FOTO 6 - "Fanel" de la empuñadura
Además a diferencia de lo que es casi norma en este tipo de dispositivos, la capacidad del mismo es de 12 cartuchos frente a los habituales 10. Este cargador es propietario, aunque en lo que sí se asemeja a otros es en uso de un perno en el medio del mismo para facilitar su carga. Al respecto de este, sería conveniente que viniese un segundo cargador con el arma, aunque entiendo que WALTHER ha querido jugar la baza de un precio ajustado.
FOTO 7 - Cargador dotado de un perno para asistir en su carga
Los acabados son perfectos, se nota que el arma está fabricada por la propia WALTHER, algo inusual, ya que la tendencia en estas versiones de pequeño calibre es que sean producidas por un tercero bajo licencia.
En el campo de tiro
Ya habíamos adelantado anteriormente que su fiabilidad es uno de sus puntos fuertes, pero es que además es precisa gracias a su cañón fijo, logrando unas buenas agrupaciones a 25 m. que van más allá de lo exigible a un arma a priori de tipo “recreativo”. Por lo demás al igual que la versión en 9 mm tiene una ergonomía superior, gracias al ángulo y picado de la empuñadura, con la ventaja que presenta un calibre 22 lr carente de retroceso y relevación para el arma.
FOTO 8 - La alabada ergonomía de la 9mm se clona en esta versión en 22lr
También realizamos varias secuencias de tiro rápido y el funcionamiento fue impecable, el disparador con su rápido reset hace que sea muy fácil repetir el disparo. La dureza justa y recorrido del mismo hacen que sea muy efectivo en tiradores avezados, pero a la vez seguro en aquellos más noveles. El cargador sale proyectado rápidamente y es fácil de insertar gracias a las guías internas de la boca de entrada del cargador en la empuñadura, que hacen la función de un discreto “fanel”.
RESUMEN
Estamos ante un arma del 22 lr, realmente polivalente y que es sin duda un valor añadido para aquellos que tienen la versión en 9 mm. Su fiabilidad y precisión, junto a su ergonomía y calidad del disparador, hacen que sea considerada un auténtico referente entre las pistolas de polímero de esta categoría.